Torreón, Coah; 20 octubre 2017.- El tesorero municipal de Torreón, Enrique Mota Barragán, dio a conocer que la calificadora S&P Global Ratings, confirmó la calificación‘mxAA’ al Ayuntamiento, con perspectiva estable, lo que “refleja su satisfactoria administración financiera, que ha mantenido un adecuado desempeño presupuestal y niveles muy bajos de deuda ante grandes proyectos de inversión”.
Detalló que la calificación de Torreón continúa limitada por una flexibilidad presupuestal y una gestión de liquidez menos fuerte que sus pares con calificación ‘mxAA+’. “Confirmaron nuestra calificación de largo plazo en escala nacional –CaVal- de ‘mxAA’ del Municipio de Torreón con perspectiva estable”.
Perspectiva
La perspectiva estable de Torreón refleja la expectativa de que, durante los siguientes dos años, la satisfactoria administración financiera del municipio ayude a mantener un desempeño presupuestal balanceado en promedio, a pesar de limitantes en la planeación financiera de largo plazo y de los grandes proyectos de inversión plurianuales que concluirán en 2017-2018.
Dentro de las anotaciones que hizo la calificadora, mencionó el jefe de las finanzas municipales, es que la actual posición de liquidez del Municipio se mantendría adecuada respecto a sus obligaciones de servicio de deuda durante este periodo.
Escenario negativo
La calificadora aseguró que podrían bajar la calificación de Torreón durante los siguientes dos años, si sus necesidades de financiamiento producen déficits recurrentes después de gasto de inversión mayores al cinco por ciento de su ingreso total, lo que presionaría la posición de liquidez del Municipio. Adicionalmente, un constante incremento del gasto operativo por encima del ingreso operativo, podría deteriorar nuestra evaluación de la flexibilidad presupuestal de Torreón.
Escenario positivo
Por otro lado, dijo Mota Barragán, S&P Global Ratings, señaló que podría subir la calificación de Torreón en los próximos dos años, si el Municipio refuerza su desempeño presupuestal a través de un incremento constante de sus ingresos propios, con lo que lograría disminuir su dependencia de las transferencias de niveles más altos de gobierno, así como de la generación de pasivo circulante. Por otra parte, una mejora de nuestra evaluación del marco institucional de municipios mexicanos, podría tener un efecto positivo en la calificación de Torreón.
Detalló que respecto a la evaluación de la flexibilidad presupuestal de Torreón, consideraron que es similar a la de pares como Puebla y Saltillo, pero menor que Querétaro, “ya que presentamos ingresos operativos consistentemente en torno al 60 por ciento de los ingresos operativos”.
La calificadora, apuntó, espera que la posición de liquidez del Ayuntamiento se mantenga adecuada ante sus bajas obligaciones financieras.
Al 30 de junio de 2017, la deuda directa de Torreón estaba compuesta por un crédito de largo plazo con la banca de desarrollo, con un saldo insoluto de 67 millones de pesos. “Nuestro escenario base no asume que Torreón contrate deuda adicional en 2017 y 2018, dadas las restricciones que implica un cambio de administración”, apuntó la financiera.
Consecuentemente, estimó la calificadora, que la deuda directa de Torreón represente en promedio dos por ciento de sus ingresos operativos durante los siguientes dos años, y que el servicio de deuda sea cercano al uno por ciento de los ingresos operativos. “Por otro lado, no estimamos que el pasivo por pensiones represente un riesgo para Torreón, ya que, de acuerdo al último estudio actuarial, su sistema de pensiones cuenta con una vigencia perenne”.
“La administración electa (PAN, 2018) asumirá funciones el 1° de enero de 2018, por un periodo de gobierno de un año. Nuestro escenario base considera que la transición se dará de manera ordenada sin mayores eventualidades, ya que el Municipio ha mostrado una adecuada resiliencia administrativa y financiera durante estos periodos en el pasado”.
Sin embargo, señaló S&P Global Ratings, la planeación y ejecución financiera de la nueva administración estará restringida dado el acotado periodo de gobierno. “Los principales retos de la administración financiera de Torreón continúan siendo lograr un alza estructural en sus ingresos propios, y mejorar la gestión de su liquidez, lo que se reflejaría en un menor uso de deuda con proveedores y una generación de efectivo más predecible durante el año”.
