Torreón, Coah; La Procuraduría de Justicia del Estado da a conocer que al mediodía de este martes los elementos de la Policía Investigadora del Estado localizaron a un padre de familia que junto con sus tres hijas menores de edad fue víctima de un secuestro virtual, aunque no hicieron pago alguno debido a que confiaron en las autoridades y denunciaron lo ocurrido.
El afectado que desde la tarde del lunes y por instrucciones de los delincuentes que lo mantuvieron amenazado por teléfono, junto con sus hijas de 15, 13 y siete años, se trasladó hasta un hotel que se ubica en la calzada Diagonal Reforma, frente a conocido centro comercial, donde pese a que contaba con poco dinero pernoctó hasta la mañana de este martes.
No obstante, los maleantes le ordenaron que se dirigiera a la explanada de la clínica 66 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que se ubica en la calzada Ávila Camacho, en la colonia Bocanegra, donde fue localizado por los elementos de la Policía Investigadora.
Esto fue resultado de que una hermana de la víctima acudió al puesto militar ubicado en el gimnasio de la colonia Las Alamedas, donde reportó que aproximadamente a las cinco y media de la tarde del lunes una voz desconocida le hizo saber que tenían en su poder a su hermano y las tres niñas, y que si quería verlos vivos, debería entregarles cien mil pesos.
Por su parte, la víctima manifestó que el lunes, un sujeto le llamó al celular indicándole que de ese teléfono los delataron ante las autoridades que detuvieron a varias personas y les recogieron dinero y armamento, con lo que les causaron un daño económico que tenían que pagar.
Al tiempo de amenazarlo de que los matarían, le ordenaron que no cortara la llamada y empezara a caminar hasta encontrar un hotel donde le seguirían dando instrucciones y fue de tal manera que llegó hasta el establecimiento de la calzada Diagonal Reforma.
Hay que señalar que el delito de secuestro virtual que deriva en extorsión, es un delito que va a la alza en la región, ya que a diario se presentan por lo menos tres casos, que son reportados a las autoridades, ya sea policíacas, militares o bien en la Delegación de la Procuraduría, donde se les orienta para que no se conviertan en víctimas de los delincuentes.
