Inicio > Coahuila > LA PUNTA DE LA MADEJA

LA PUNTA DE LA MADEJA

Julián Parra Ibarra

¿El nuevo Veracruz?

Hasta el cansancio se ha dicho que el estado de Veracruz se ha convertido en los años recientes en el estado más peligroso para el ejercicio del periodismo en México, país que además está entre los más riesgosos del orbe para quienes ejercemos –como diría el Gabo- el oficio más hermoso del mundo, y de eso no existe la menor de las dudas.

El problema es que corporaciones policiacas municipales en nuestro estado, han estado haciendo todo lo posible por meterá Coahuila en ese ranking.  En Torreón, Eduardo Valenzuela ‘Guayo’, caricaturista del periódico El Siglo, y quien se distingue por su dura línea crítica a los diferentes niveles de gobierno, fue agredido por policías municipales.

Los tripulantes de la patrulla 35173 no sólo lo detuvieron, sino que lo insultaron, lo golpearon, lo acusaron de ser responsable de robo de autos, y lo amenazaron de muerte.

No es el primero

La organización de periodistas Voces Irritilas, que dirige el periodista y maestro universitario Juan Noé Fernández Andrade, dio a conocer que cuando ‘Guayo’ pidió a los uniformados una explicación sobre su actuación, recibió como respuesta empellones, agresiones verbales y amenazas. Finalmente luego de que le permitieron identificarse, lo soltaron previa advertencia de que lo iban a ‘madrear’, porque estaba acusado de robo de carros junto con otra persona.

El caso del ‘Guayo’, quien además es artista plástico y maestro universitario, no es el primero que se registra recientemente en Torreón. Voces Irritilas recordó que el año pasado, también elementos de la policía municipal, agredieron y despojaron de su equipo de trabajo al fotógrafo de Milenio Laguna, Efrén Maldonado. Este caso permanece impune porque las autoridades locales no actuaron ni con los agresores ni hubo siquiera alguna manifestación por la conducta de los integrantes de dicha corporación.

Ojalá que el caso de Eduardo Valenzuela –a quien le enviamos todo nuestro apoyo y solidaridad-, no vaya a quedar en la impunidad.

También hace aire

Dice un lugar común: ‘Para que vean que también en San Juan hace aire’, y es aplicable a la policía municipal de Saltillo, que no se quisieron quedar atrás. El pasado domingo, los cuatro tripulantes de la patrulla 12736. Agredieron, intimidaron e intentaron despojar de su cámara fotográfica, a la periodista Carmen Villa Silva, quien documentaba la agresión de que estaba siendo objeto un ciudadano de parte de los uniformados.

El problema con el ciudadano además al parecerá era de índole personal con una de las uniformadas, de nombre Judith y apodada ‘La Güera’. Cuando los policías se dieron cuenta de la presencia de la reportera, la intimidaron e intentaron quitarle la cámara.

Al menos en Saltillo, hubo una respuesta inmediata del alcalde Isidro López Villarreal, quien a través de su cuenta de twitter, escribió: ‘Estamos investigando. De ninguna manera toleraremos agresiones  a reporteros’. Ojalá allá no haya impunidad.

Más de lo mismo

Desde que tomó posesión como Director de Tránsito y Vialidad de Torreón, Ricardo Hamdan Huereca ha realizado esfuerzos importantes por darle orden, disciplina y, sobre todo cambiar la imagen de la corporación con esfuerzos notables por erradicar la corrupción, habría que recordar la exitosa campaña de ‘Sé correcto, no corrupto’.

Por ello, le damos un botón de los que manchan la labor que realiza, el pasado sábado alrededor del mediodía, un par de mujeres agentes viales que tripulaban la patrulla 35476 llegaron para reclamar al conductor de un camión de mudanzas que estaba estacionado sobre la Abasolo y Colón, realizando labores de descarga de muebles. Le arguyeron que en esa zona no se podían hacer ese tipo de maniobras.

Hasta ahí podría ser que las dos mujeres tuvieran la razón –digo podría, porque sólo los agentes conocen el reglamento, que muchos de ellos no respetan-, pero enseguida le pusieron precio para hacerse de la vista gorda: 100 pesos colocados en la ‘tabla’ en la que el conductor del camión realizaba sus apuntes, se los llevó a la patrulla, una de ellas sentada al volante sacó el billete y regresó la tabla, mientras que la otra le proporcionaba la clave del día ‘130268 Sierra’ por si acaso los molestaba otra patrulla, ese era su salvoconducto.

Así, ni más, ni menos.

laotraplana@gmail.com

@JulianParraIba