Saltillo Coahuila de Zaragoza a 16 de Julio de 2015.- El 16 de Julio de 2015, el Estado de Coahuila concluyó el refinanciamiento de la totalidad de su deuda pública, por un monto de $36,767 millones de pesos.
En la operación participaron 7 instituciones bancarias, seleccionadas a través de un proceso competitivo que permitió al Estado obtener las condiciones financieras más favorables del mercado actual.
Gracias a la mejora en las condiciones de la deuda, la transacción generará ahorros netos para el Estado por un monto en estimado de $3,100 millones de pesos por concepto de servicio de deuda durante la actual administración y un monto estimado en $6,000 millones de pesos durante el período restante de los créditos refinanciados.
Esta liberación de flujo equilibrará las finanzas y permitirá realizar proyectos de inversión pública dirigidos a incrementar la competitividad del Estado.
Los ahorros se lograron gracias a la mejora en las finanzas del Estado y a la estructura legal y financiera diseñada particularmente para esta operación, a la cual se incorporaron elementos mitigantes de riesgo como la Garantía de Pago Oportuno proporcionada por Banobras, así como un Seguro de Tasa de Interés por los primeros 3 años de la vida de los financiamientos.
Un elemento innovador en la estructura, es la incorporación de un mecanismo que permite crear una reserva para atender las obligaciones de fin de año relacionadas con el pago de aguinaldos.
Con ello se reduce el riesgo que representa esta contingencia para el Estado y se logra una mejor planeación para el corto y el largo plazo.
La estructura además permitió liberar el 25% del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas y el 100% del Impuesto Sobre Nómina, que se encontraban afectados como garantía de la deuda pública.
Es importante también recalcar que ninguna administración futura pagará más que la actual como proporción de sus ingresos, lo que representa responsabilidad y sustentabilidad en el largo plazo.
Finalmente, cabe destacar que la operación será calificada por agencias calificadoras de riesgo internacionales que mantendrán un monitoreo constante de las finanzas estatales.
Así mismo, la operación se convirtió en la primera en su tipo en México en contar con la supervisión del Banco Interamericano de Desarrollo, garantizando para el proceso los más altos estándares en materia de planeación, ejecución y transparencia.